Frontera segura y sistema de inmigración justo
Los demócratas de la Cámara Baja luchan por un proceso seguro y ordenado en la frontera sur que proteja el derecho a buscar asilo e inmigrar legalmente. También están luchando para aprobar una reforma migratoria que incluya un camino a la ciudadanía a quienes han vivido aquí durante décadas – como los Dreamers – quienes pasan la verificación de antecedentes, pagan impuestos y que hacen grandes contribuciones a nuestro país. Mientras tanto, los republicanos extremistas hacen política con temas fronterizos, rechazando soluciones por lealtad a Trump y recurriendo a una retórica divisiva que pone a nuestras comunidades en peligro.
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Los estadounidenses apoyan la reforma migratoria bipartidista, pero los republicanos extremistas rechazaron un acuerdo fronterizo bipartidista con el que se habría podido aumentar los fondos para la patrulla de frontera, añadir más jueces de inmigración y funcionarios de asilo, y comprometer más recursos para luchar contra la crisis del fentanilo.
Donald Trump se jactó de haber acabado con el acuerdo fronterizo bipartidista, diciendo que “no iba a hacerse realidad” y que “lucharía hasta el final” para impulsar su reelección y los republicanos de la Cámara Baja se alinearon de inmediato.
Donald Trump trató de poner fin al programa de DACA, arrancó a niños de los brazos de sus madres, afirmó que los inmigrantes están “envenenando la sangre de nuestro país” y redobló su apuesta con un plan para separar familias mediante la deportación de millones de personas que han vivido en Estados Unidos durante décadas.
